8 de Marzo, Día Mundial del Riñón: La importancia de la donación
Por iniciativa de la Sociedad Internacional de Nefrología (ISN) y la Federación Internacional de Fundaciones del Riñón (IFKF) se celebra el 8 de marzo el Día Mundial del Riñón.
Por este motivo, la Sociedad Argentina de Nefrología y el Hospital El Cruce adhieren a esta iniciativa y se suman a esta conmemoración realizando una serie de actividades de promoción y difusión. El objetivo es llevar información a la población sobre este acontecimiento y la relevancia de la insuficiencia renal crónica como problema de salud.
El lema de este año es: Dona-Riñones para la Vida-Recibe. El objetivo es poner en perspectiva el importante tema de la donación de órganos, y de riñones en particular. Los programas de trasplantes en todo el mundo necesitan de la donación, y para esto es de trascendental importancia que cada ser humano identifique en el acto de donar una responsabilidad ciudadana que tiene como fin contribuir a que otros ciudadanos se puedan beneficiar. La donación debe ser un gesto de solidaridad, libre de toda compensación alguna.
Actividades en el distrito
La dirección del Hospital El Cruce tiene previsto para el 8 de marzo realizar una actividad de promoción a partir de las 10 horas en la sede del centro asistencial. Durante la jornada se distribuirán folletos informativos y educativos. En tanto, el sábado 10 de marzo a partir de las 10 de la mañana se realizará una Caminata en la plaza de Florencio Varela ubicada en la avenida San Martín y Chacabuco para promocionar el cuidado renal y promover la donación. La iniciativa es organizada por profesionales del Centro de diálisis Fresenius Medical Care Florencio Varela y cuenta con el apoyo de la secretaría de Salud de Florencio Varela y el Hospital El Cruce.
El lema de este año es: Dona-Riñones para la Vida-Recibe. El objetivo es poner en perspectiva el importante tema de la donación de órganos, y de riñones en particular. Los programas de trasplantes en todo el mundo necesitan de la donación, y para esto es de trascendental importancia que cada ser humano identifique en el acto de donar una responsabilidad ciudadana que tiene como fin contribuir a que otros ciudadanos se puedan beneficiar. La donación debe ser un gesto de solidaridad, libre de toda compensación alguna.
Actividades en el distrito
La dirección del Hospital El Cruce tiene previsto para el 8 de marzo realizar una actividad de promoción a partir de las 10 horas en la sede del centro asistencial. Durante la jornada se distribuirán folletos informativos y educativos. En tanto, el sábado 10 de marzo a partir de las 10 de la mañana se realizará una Caminata en la plaza de Florencio Varela ubicada en la avenida San Martín y Chacabuco para promocionar el cuidado renal y promover la donación. La iniciativa es organizada por profesionales del Centro de diálisis Fresenius Medical Care Florencio Varela y cuenta con el apoyo de la secretaría de Salud de Florencio Varela y el Hospital El Cruce.
Consejos para tener en cuenta:
Estos son los ocho consejos de la Fundación Mundial del Riñón (WKF) para contribuir con en el control de la salud renal:
" Mantenerse en línea y activo. Caminar, correr o andar en bicicleta ayuda a mantener controlada la presión arterial, con lo cual disminuye el riesgo de progresión de la enfermedad renal crónica.
" Mantener bajo control los niveles de glucosa en la sangre. Alrededor de la mitad de las personas con diabetes desarrollan algún grado de daño renal a causa de ella, por lo que es importante que, además de mantener a raya los niveles de glucosa en la sangre, se realicen regularmente los análisis de creatinina y proteinuria, que son los marcadores clínicos de la función renal. Esto puede ayudar al control de ambas condiciones crónicas.
" Controlar regularmente la presión arterial. Muchos controlan su presión por temor a un ACV o a un infarto de miocardio, pero tal vez ignoran que la hipertensión arterial es el principal factor de riesgo para la enfermedad renal crónica. Los valores normales de presión sistólica y diastólica se hallan en 120 y 80 milímetros de mercurio respectivamente. Si los valores se remontan a 140/90, se incrementa el riesgo de daño renal, especialmente cuando a esos valores de presión se agregan altos niveles de glucosa o de colesterol, o una enfermedad cardiovascular.
" Comer saludablemente y mantenerse en peso. Esto ayuda a controlar tanto la hipertensión, como la diabetes y otras condiciones ligadas a la salud renal. Bajar el consumo de sal: no más de una cucharadita pequeña de café (equivalente a 2 a 3 gramos de sal) por día, tratando a la vez de consumir menos comidas preprocesadas, incluyendo quesos, embutidos y panificados, en las que el consumo de sal no se puede regular.
" Hidratarse con agua. No existe un único acuerdo en cuanto a la cantidad exacta de agua que es necesario consumir diariamente, y además esta depende de la edad, el género, el volumen corporal, el clima y otros factores; pero en líneas generales se calcula que entre un litro y medio y dos litros por día es una cantidad apropiada. Esto colabora con la función depuradora de los riñones, que eliminan los excesos de sales, urea y toxinas. A las personas con antecedentes de litiasis (cálculos renales) se les recomienda incluso beber entre 2 y 3 litros diarios.
" No fumar. Fumar disminuye el flujo de sangre hacia los riñones, lo cual de por sí dificulta la función de estos; y además, incrementa un 50% el riesgo de cáncer renal.
" No tomar medicamentos sin consulta previa. Atención con la sobremedicación: se sabe que muchos antiinflamatorios no esteroides (como el conocido ibuprofeno, diclofenac y aspirina) pueden afectar a los riñones cuando son consumidos muy asiduamente. Si sólo se toman estas drogas esporádicamente, por períodos acotados o en casos de necesidad, todo está en orden; pero las personas que sufren de dolor crónico por problemas óseos o articulares, por ejemplo, conviene que consulten a su médico para evaluar otras alternativas.
" Chequear periódicamente la función renal ante factores de riesgo. Las personas con hipertensión arterial, diabetes, obesidad, con enfermedad cardiovascular, con antecedentes en su familia de enfermedad renal crónica, o que hayan superado los 65 años deben controlar periódicamente sus valores de creatinina y proteinuria.
Estos son los ocho consejos de la Fundación Mundial del Riñón (WKF) para contribuir con en el control de la salud renal:
" Mantenerse en línea y activo. Caminar, correr o andar en bicicleta ayuda a mantener controlada la presión arterial, con lo cual disminuye el riesgo de progresión de la enfermedad renal crónica.
" Mantener bajo control los niveles de glucosa en la sangre. Alrededor de la mitad de las personas con diabetes desarrollan algún grado de daño renal a causa de ella, por lo que es importante que, además de mantener a raya los niveles de glucosa en la sangre, se realicen regularmente los análisis de creatinina y proteinuria, que son los marcadores clínicos de la función renal. Esto puede ayudar al control de ambas condiciones crónicas.
" Controlar regularmente la presión arterial. Muchos controlan su presión por temor a un ACV o a un infarto de miocardio, pero tal vez ignoran que la hipertensión arterial es el principal factor de riesgo para la enfermedad renal crónica. Los valores normales de presión sistólica y diastólica se hallan en 120 y 80 milímetros de mercurio respectivamente. Si los valores se remontan a 140/90, se incrementa el riesgo de daño renal, especialmente cuando a esos valores de presión se agregan altos niveles de glucosa o de colesterol, o una enfermedad cardiovascular.
" Comer saludablemente y mantenerse en peso. Esto ayuda a controlar tanto la hipertensión, como la diabetes y otras condiciones ligadas a la salud renal. Bajar el consumo de sal: no más de una cucharadita pequeña de café (equivalente a 2 a 3 gramos de sal) por día, tratando a la vez de consumir menos comidas preprocesadas, incluyendo quesos, embutidos y panificados, en las que el consumo de sal no se puede regular.
" Hidratarse con agua. No existe un único acuerdo en cuanto a la cantidad exacta de agua que es necesario consumir diariamente, y además esta depende de la edad, el género, el volumen corporal, el clima y otros factores; pero en líneas generales se calcula que entre un litro y medio y dos litros por día es una cantidad apropiada. Esto colabora con la función depuradora de los riñones, que eliminan los excesos de sales, urea y toxinas. A las personas con antecedentes de litiasis (cálculos renales) se les recomienda incluso beber entre 2 y 3 litros diarios.
" No fumar. Fumar disminuye el flujo de sangre hacia los riñones, lo cual de por sí dificulta la función de estos; y además, incrementa un 50% el riesgo de cáncer renal.
" No tomar medicamentos sin consulta previa. Atención con la sobremedicación: se sabe que muchos antiinflamatorios no esteroides (como el conocido ibuprofeno, diclofenac y aspirina) pueden afectar a los riñones cuando son consumidos muy asiduamente. Si sólo se toman estas drogas esporádicamente, por períodos acotados o en casos de necesidad, todo está en orden; pero las personas que sufren de dolor crónico por problemas óseos o articulares, por ejemplo, conviene que consulten a su médico para evaluar otras alternativas.
" Chequear periódicamente la función renal ante factores de riesgo. Las personas con hipertensión arterial, diabetes, obesidad, con enfermedad cardiovascular, con antecedentes en su familia de enfermedad renal crónica, o que hayan superado los 65 años deben controlar periódicamente sus valores de creatinina y proteinuria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario